En el mes de marzo de 2022 se celebraron los premios Oscar en su 94.ª edición, sin embargo, las noticias de este evento se dieron no por sus presentaciones o la elección de ganadores, los comentarios giraron en torno a la agresión del reconocido actor Will Smith contra el humorista Chris Rock, quien después del incidente pidió disculpas y expresó: “mi comportamiento fue inaceptable”.
Todas las personas experimentan diferentes emociones a lo largo de la vida, estas, les permiten reaccionar y adaptarse al entorno en el que viven. La ira es una emoción natural producto de sucesos que crean descontento, humillación, percepción de injusticia y un sin fin de situaciones que generan malestar a las personas. Sentir ira es adaptativo, es una emoción necesaria y está presente en todos. Sin embargo, cuando esta ira es desproporcionada y se liga con comportamientos violentos contra sí mismo o los demás, trae consecuencias negativas para la persona y su entorno.
Quienes experimentan de manera frecuente respuesta de ira, viven en estado de alerta defensivo, creen que los demás tratan de causarles algún tipo de malestar y esto deteriora significativamente sus relaciones interpersonales, porque hieren a sus seres queridos y a sí mismos. Es frecuente que quienes le rodean empiecen a verlos con recelo, a sentirse intimidados o temerosos en su compañía. Además, cuando la persona se calma, se siente avergonzada por sus actos o su lenguaje. Estas expresiones de ira repercuten significativamente en la salud mental y física de todos los que vivencian la situación ya que se experimentan estados de tensión física y pensamientos negativos.
Es importante hacer un llamado a la serenidad, a la calma y a la gestión de las emociones, reconocerlas, identificarlas y precisar que las desencadenan, es muy importante para encauzarlas de forma positiva y evitar conflictos consigo mismo y con los demás. Sin embargo, si una persona siente que las emociones le desbordan y no puede manejarlas, es recomendable solicitar ayuda a profesionales de la salud mental que a través de un proceso de intervención y entrenamiento le brindarán herramientas para hacer de las emociones fuente de información y adaptación al entorno.